Durante la realización de reformas, nos encontramos muchas veces con antiguos radiadores, castigados por el paso del tiempo, y por el paso de los distintos propietarios de las viviendas, radiadores que van recibiendo una y otra mano de pintura una encima de otra, y en unos colores inimaginables.
En numerosas ocasiones estos radiadores se les pasa una lija, y se vuelven a pintar, pero podemos recuperar su aspecto original.
“démosles una nueva vida a estos radiadores”
Los radiadores de hierro fundido, son los ideales para este tipo de trabajos, y además si levantamos todas las capas de pintura, y los dejamos con el metal visto, quedan con un aire muy vintage.
Hay numerosas técnicas para la rehabilitación de radiadores, si bien el chorreado de arena es la más rápida, también es la técnica más abrasiva, y deberemos de tener cuidado de no estropear las juntas y uniones de los radiadores ya que se suele realizar en un horno a alta temperatura, y también porque si los radiadores son muy antiguos, puede ser dificultoso encontrar repuestos para estos.
Para realizar la restauración de los radiadores a mano, podemos impregnarlos con un decapante, ya sea en líquido o en gel, para poder ablandar la pintura que tenga el radiador.
Una vez se deja actuar el decapante, hay que proceder a levantar las distintas capas de pintura que tenga. Podemos utilizar un cepillo de púas metálicas, bien sea de manera manual, o bien ayudándonos de una radial o de un taladro para no eternizarnos en el asunto, aunque habrá numerosas partes del radiador que no sea imposible acceder con la máquina.
En el mercado hay diferentes cepillos de púas, en función de la forma o del tamaño, esto nos puede ayudar para que según sea el modelo de radiador podamos intentar acceder más en profundidad. En las imágenes se están restaurando radiadores de Roca de hierro fundido que son los más comunes de encontrar en el mercado.
Una vez levantadas todas las capas de pintura, podemos proceder a pintarlos de nuevo o bien si queremos conservar el aspecto antiguo, darlos un barniz incoloro.
Hay que tener en cuenta que tanto para pintarlos como para barnizarlos tenemos que utilizar un producto especializado que aguante los cambios de temperatura que va a producir el radiador cuando vuelva a estar en funcionamiento.
Quieres ver como darle un acabado:
